Viajé desde Málaga a esta boda destino en el Hotel Balneario Orduña Plaza, País Vasco para conocer este bonito lugar llamado Lendoño de abajo en Orduña, un pueblo muy pequeño pero con unas vistas lindísimas de montañas y paisajes verdes.
Una de las primeras cosas que Ana y Juanjo me comentaron sobre su boda y que al instante me atrapó y emocionó muchísimo fue que no sería una boda típica sino una boda más sencilla de lo normal.
Ellos se vistieron en el mismo lugar, lo que fue increíble porque hizo mucho más emotivo el momento de la preparación. Había un ambiente relajado y familiar.
De vez en cuando cada uno echaba un ojo a ver como iba su pareja, a veces para ayudarle con los últimos toques del peinado o hasta la madre de Ana pasaba para ayudar a Juanjo a colocarse el traje y hacerle pequeñas bromas, pero siempre desde el apoyo y el cariño.
Ya cuando ambos estuvieron listos se preparó un lugar fuera de la casa para hacer la primera vista de los novios donde Juanjo vería a Ana vestida de novia por primera vez, momento que sin querer fue cómico porque que se veía por completo de donde sería la ceremonia así que varios invitados que llegaron temprano compartieron este momento con los novios y aprovecharon de saludarlos desde lejos.
La ceremonia se realizó en la casa torre de Lendoño de Abajo y aprovecharon los jardines para hacer un cóctel al aire libre con todos sus amigos y familiares más cercanos.
Estaba súper claro que no podíamos perder esta oportunidad de hacer algunas fotos con estos paisajes y es que no tuvimos que alejarnos mucho, solo con caminar un poco alrededor de la casa conseguimos un camino rústico con una espectacular montaña de fondo.
Después de terminar el cóctel fuimos al Hotel Balneario Orduña Plaza para un almuerzo íntimo con los familiares de los novios.Estos momentos los aprecio porque se siente una vibra muy especial, es difícil explicar como fotógrafo de bodas lo que se siente compartir estos momentos con personas a las que conoces desde hace muy poco tiempo pero te hace sentir como si fueras uno más de ellos, te tratan como de la familia y te transmiten toda esa energía cargada de sentimientos y emociones intensas que te invita a vivir el dia de la boda desde el mismo estado de felicidad y emotividad que ellos.
Poco a poco fueron llegando los amigos de los novios al hotel para compartir con ellos la alegría de su boda y por supuesto para no perderse la fiesta, el cotillón y la locura.
Si te gustaron las fotos de boda de Ana y Juanjo y están pensando casarse en el Hotel Balneario Orduña Plaza no duden en contactarme, estaré encantado de ser su fotógrafo de bodas en el País Vasco.